En el camino encontraras espacios vacíos, lugares desolados, estanques de mentiras y montañas de oposición. La fortaleza del hombre no se mide en los momentos buenos. Más bien en la dificultad es cuando el carácter del hombre demuestra su forma.
Proverbios 18:20-21 (RVR60)
(20) Del fruto de la boca del hombre se llenará su vientre; Se saciará del producto de sus labios. (21) La muerte y la vida están en poder de la lengua, Y el que la ama comerá de sus frutos.
Cuidar tus pasos es el comienzo. Mantenerse firme no sólo es habla de lo físico, más bien es lo espiritual, esta parte de ti debes mantener siempre fuerte. Porque vendrán batallas que sólo Dios podrá librar por ti. Y sólo Dios podrá darte la victoria. La palabra de Dios dice que lo que el cuerpo no es lo que entra más bien lo que sale. Porque de la abundancia del corazón habla la lengua.
Cuando David se enfrentó a Goliat, esté lo miro y le hablo con desprecio.
1 Samuel 17:43-45a (RVR60)
(43) Y dijo el filisteo a David: ¿Soy yo perro, para que vengas a mí con palos? Y maldijo a David por sus dioses. (44) Dijo luego el filisteo a David: Ven a mí, y daré tu carne a las aves del cielo y a las bestias del campo.
Pero david sabía con quien el contaba y su corazón hablo por El.
(45) Entonces dijo David al filisteo: Tú vienes a mí con espada y lanza y jabalina; mas yo vengo a ti en el nombre de Jehová de los ejércitos, el Dios de los escuadrones de Israel, a quien tú has provocado.
No dejes que las adversidad defina tu camino. Enfrenta al gigante de una forma diferente. Expresarle a Dios lo sientes. Y enseñarle al mundo quien es que lucha por ti. En medio de la batalla unos corren y otros luchan. Dios te hizo para luchar y para bendecir. La diferencia está en en que las batallas son de El. Y nosotros debemos de confiar en su fidelidad.
Hoy toma acepta el reto. De bendecir a dos o tres personas en tu vida. Bendice a tus seres queridos y deja que lo que abunda en tu corazón salga y sea de bendición para aquellos que están alrededor tuyo.